Muchas veces recordamos las batallas perdidas, las amistades perdidas,las puertas que dejamos de abrir por el simple echo de que teniamos miedo de ver lo que habia en el otro lado, ahora viene la pregunta que nunca consigo resolver, ¿por qué casi nunca recordamos los momentos buenos? Hay una respuesta simple. Los momentos buenos suelen permanecer poco tiempo en tu vida, porque siempre que te levantas e intentas andar varios kilometros te encuentras otra piedra mas fuerte y tropiezas.
Por esa razon ahora voy mirando cuidadosamente el suelo por el que ando, para poder recorrer todos los kilometros que quiera sin tropezarme con las piedras, para poder recordar solo los momentos buenos, para poder aprovechar el tiempo perdido y lo más importante para poder ser feliz.